La tecnología puede ser tu mejor aliado o tu peor enemigo.
Con una computadora o celular y acceso a internet, hoy se pueden hacer cosas para las que antes era necesario salir de casa. Ya se pueden pagar las cuentas, comprar ropa y comida, tener consultas médicas básicas y ver películas.
Para la mayoría de las actividades que realizamos en internet es necesario proveer al menos uno de nuestros datos personales. En nuestros dispositivos se encuentra gran parte de nuestra vida, además de claves de correo, números de tarjetas y cuentas bancarias, y uno que otro secreto.
Por la gran importancia y peligro de la información que circula por nuestra computadora y celular, es importante conocer cómo podemos protegernos contra ataques de hackers.Un hackeo puede ir desde un robo de contraseñas para redes sociales (en el mejor de los casos), hasta un completo robo de identidad o incluso espionaje por medio de la cámara web.
Para evitar la pena y la angustia de ser hackeado, aquí te presentamos algunos tips que puedes aplicar para proteger tu información:
- Revisa los hipervínculos antes de darles clic: los hipervínculos en correos electrónicos y otras páginas de internet representan un gran riesgo. Sobre todo si el hipervínculo lo recibimos de una persona conocida, tendemos a confiar en que la página que nos envían es segura, pero no siempre es el caso. Algunos hipervínculos llevan a páginas que no coinciden con el texto del hipervínculo. La solución es simple, pasa tu cursor por encima del texto del hipervínculo hasta que aparezca la dirección a la que se dirige. Si la dirección no coincide con la página que intentas visitar, mejor no des clic.
- Sé cuidadoso al descargar archivos: incluso si provienen de una fuente “confiable”, no abras todo lo que te envían.
- Apaga el Wi-Fi y el Bluetooth en cuanto salgas de casa: es difícil estar sin comunicación, pero esta medida puede protegerte de redes no seguras y, además, ahorrarás batería. Y si es necesario usar una red pública, no compartas información personal mientras estás conectado.
- Haz que tus perfiles de las redes sociales sean privados: si tienes perfiles públicos en redes sociales, eso significa que cualquier persona puede acceder al contenido que publicas. Por muy precavidos que intentemos ser, siempre hay detalles que se nos escapan y que pueden ayudar a un hacker a encontrar pistas para acceder a tu información confidencial.
- Usa respuestas falsas en las preguntas de seguridad: es muy fácil obtener las respuestas a las preguntas de seguridad más comunes, con simples juegos podrías estar dándole a un desconocido la clave para entrar a tu correo electrónico. Solamente asegúrate de poder recordar las respuestas falsas.
- No publiques información personal en redes sociales: la tentación de compartir todo lo que hacemos o pensamos puede ser muy grande, pero también representa un gran riesgo. Abstente de publicar datos personales, ubicación o información de tus seres queridos.
- Usa un método de bloqueo complicado en tu celular: la forma más común es un código de cuatro dígitos o un patrón que puede ser fácilmente descifrado. Cambia a un método de bloqueo más complejo para minimizar riesgos.
- Utiliza herramientas diseñadas para identificar malware: por ejemplo, urlquery.net escanea las páginas de internet en busca de malware. Estas herramientas pueden evitar que entres a una página potencialmente peligrosa.
- Descargar un administrador de contraseñas: existen varios programas como 1Password, Dashlane y LastPass, entre otros, que se pueden utilizar para administrar contraseñas.
- Utilizar una VPN: es decir, una “Virtual Private Network” o una “Red Virtual Privada”. Una VPN disminuye los peligros de usar una red pública de WiFi. Los VPN pasa el tráfico de internet por un servidor intermedio antes de que llegue a tu computadora.
- Monitorea las conexiones de tu computadora: una señal obvia de que tu computadora está en peligro es que comience a enviar datos a un servidor desconocido para ti. La aplicación Little Snitch monitorea las conexiones que salen de tu computadora.
Algunas de estas acciones pueden parecer simples, pero tomar pequeñas medidas puede evitar que tus datos personales estén expuestos.